El pacto busca reducir aranceles y fomentar el comercio bilateral
Este domingo, Estados Unidos y China anunciaron la firma de un nuevo acuerdo comercial que pone fin a años de tensiones y guerras arancelarias entre las dos mayores economías del mundo. El Representante Comercial de EE. UU. explicó que el país tiene un déficit comercial de 1,2 billones de dólares, lo que llevó al presidente Donald Trump a declarar una emergencia nacional e imponer aranceles. Este nuevo acuerdo con China busca abordar dicha emergencia.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, resaltó avances sustanciales en las conversaciones, aunque los detalles específicos del acuerdo se revelarán más adelante. Trump calificó las negociaciones como “muy buenas” y destacó un “reinicio total” en las relaciones comerciales con China, con una interacción amistosa y constructiva. Además, anticipó una posible reducción de los aranceles del 145% al 80%.
El acuerdo incluye la creación de un mecanismo de consulta económica y comercial para resolver disputas futuras y fomentar una relación más estable y predecible entre ambas naciones. Se espera que este pacto tenga un impacto positivo en los mercados globales y en las cadenas de suministro internacionales.